Minería argentina en alerta: preocupación por el avance de proveedores chilenos

Empresarios locales advierten sobre una creciente competencia desleal en el sector minero por parte de firmas chilenas y peruanas. Reclaman intervención política y una pronta sanción de la Ley de Compre Local en San Juan.

Actualidad29/07/2025Aire Argentino MineroAire Argentino Minero
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La política de apertura económica impulsada por el gobierno de Javier Milei empieza a generar tensiones en sectores productivos clave como la minería. Si bien la industria celebra el compromiso presidencial para acelerar proyectos estratégicos de litio y cobre, ahora también crecen las alertas por la irrupción de proveedores extranjeros, en especial chilenos, que estarían ganando contratos y participación en detrimento de empresas locales.

Las recientes palabras del presidente del Consejo Minero de Chile, Joaquín Villarino, sumaron combustible al conflicto: “Los argentinos no son buenos en minería, van a necesitar que los chilenos crucemos la cordillera y les expliquemos cómo se hace”. Si bien muchos lo interpretaron como una provocación, lo cierto es que sus declaraciones parecen confirmar una estrategia activa de internacionalización de más de 8.000 empresas proveedoras chilenas, lideradas por el organismo estatal ProChile.

El desembarco no es solo simbólico: en ferias como San Juan Minera ya se detectó una fuerte presencia de empresas de Chile y Perú, que ofrecen desde logística pesada hasta tecnología para perforación y monitoreo, bajo condiciones económicas más competitivas.

San Juan: epicentro de la tensión
El foco de mayor fricción se encuentra en San Juan, especialmente en torno al proyecto Vicuña —del grupo Lundin— que comprende los yacimientos Josemaría y Filo del Sol. Desde la Cámara de Proveedores Interdepartamentales Mineros de San Juan (CAPRIMSA) aseguran que al menos cinco empresas chilenas operan allí con contratos activos, flota propia e insumos a menor costo, gracias a una carga impositiva significativamente menor en su país de origen.

"Es una competencia desleal. El sistema económico argentino nos castiga. Si no hay intervención política, vamos a mirar cómo otros se llevan el trabajo", expresó Fernando Godoy, presidente de CAPRIMSA.

Un tratado bajo revisión
Parte del problema radica en el Tratado Binacional Minero firmado en 1999 entre Argentina y Chile. Este acuerdo permite la libre circulación de insumos, equipos y trabajadores para proyectos transfronterizos, lo que hoy otorga a las empresas chilenas ventajas estructurales frente a las locales. Desde CAPRIMSA proponen revisar o al menos actualizar sus condiciones antes de una renovación automática prevista para 2029.

Mientras tanto, más de 30 empresas sanjuaninas esperan poder competir en igualdad de condiciones, ofreciendo desde transporte hasta perforación, pero se ven limitadas por un entorno macroeconómico hostil y falta de políticas claras.

cámara minera San Juan

El rol del Compre Local
Ante este escenario, crecen las expectativas sobre el tratamiento legislativo de la Ley de Compre Local, impulsada por el Ministerio de Minería de San Juan. La normativa buscaría establecer criterios objetivos y previsibles para priorizar proveedores locales en los contratos mineros, sin imponer cupos fijos, pero sí exigiendo a las compañías presentar planes de vinculación concreta con empresas de la provincia.

"No podemos intervenir en las decisiones financieras de las mineras, pero sí exigir licitaciones transparentes y condiciones para que los proveedores locales compitan en igualdad", afirmó el ministro Juan Pablo Perea.

Una tensión que crece
Mientras proyectos como Veladero avanzan con buen diálogo con los proveedores locales, en Vicuña denuncian casi nula comunicación. La preocupación es concreta: según CAPRIMSA, este nuevo proyecto podría demandar hasta 700 proveedores, el doble que Veladero. “Los chilenos vienen, trabajan y se van. Nosotros estamos acá en las buenas y en las malas”, resume Godoy.

La disputa por el abastecimiento minero no es menor. En juego están miles de empleos, la sustentabilidad de pymes locales y una porción significativa del desarrollo productivo argentino en zonas estratégicas como Cuyo y el Norte.

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